El segundo mandato del presidente Donald Trump ha traído cambios significativos en la política de criptomonedas de Estados Unidos, marcados por órdenes ejecutivas y la aprobación de la Ley GENIUS. Estas medidas han tenido como objetivo fortalecer el marco regulatorio para los activos digitales. Nombramientos clave en los organismos reguladores han moldeado aún más el panorama, reflejando un enfoque más estructurado hacia la gobernanza de las criptomonedas. A pesar de estos avances, la administración enfrenta obstáculos, incluyendo un cierre gubernamental que ha detenido el progreso legislativo. La inacción del Senado respecto a la Ley de Claridad del Mercado de Activos Digitales y los retrasos en el establecimiento de una reserva federal de bitcoin destacan los desafíos en curso. Estos problemas subrayan las complejidades de navegar la política criptográfica en medio de incertidumbres políticas y económicas.