Los legisladores polacos no pudieron anular el veto del presidente Karol Nawrocki a un proyecto de ley sobre la regulación de las criptomonedas, frustrando el impulso del primer ministro Donald Tusk para regular la industria de activos digitales. La cámara baja del parlamento no logró la mayoría requerida de tres quintos para superar el veto. Tusk había enfatizado la importancia del proyecto de ley para la seguridad nacional, citando preocupaciones sobre las actividades rusas en el mercado de criptomonedas. Argumentó que la legislación proporcionaría las herramientas necesarias para controlar un mercado no regulado supuestamente infiltrado por inteligencia rusa y entidades criminales. El proyecto de ley tenía como objetivo alinear a Polonia con los estándares de la UE para la regulación de criptomonedas.