Nakamoto ($NAKA), una empresa de tesorería de Bitcoin, ha experimentado una caída dramática del 96% en el valor de sus acciones durante los últimos seis meses. La fuerte caída se atribuye a la falta de fuentes claras de ingresos de la empresa, a una sobrevaloración inicial y a estrategias inadecuadas de gestión de riesgos vinculadas a las fluctuaciones del precio de Bitcoin. El modelo de negocio de la firma, fuertemente dependiente de la apreciación de Bitcoin, se ha visto socavado por precios estancados o en declive de BTC, lo que genera preocupaciones sobre la viabilidad de las empresas que dependen principalmente de las tenencias de criptomonedas. Esta caída significativa ha erosionado la confianza de los inversores en las empresas centradas en la tesorería, destacando los riesgos asociados con dichos modelos de negocio.