El oro es cada vez más visto como una herramienta valiosa de diversificación ante las incertidumbres económicas y políticas de Estados Unidos, según Patrick Brenner de Schroders. Él destacó el estatus del oro como refugio seguro y su baja correlación con los activos tradicionales como razones de su creciente atractivo. A medida que los niveles tradicionales de soporte y resistencia del mercado fluctúan, los inversores recurren al oro para mitigar riesgos. Brenner identificó la incertidumbre política, la fragilidad fiscal y las preocupaciones sobre los bonos del Tesoro de EE.UU. como los principales impulsores de esta tendencia.