Cathie Wood ha ajustado su objetivo de precio para Bitcoin en 2030, reduciéndolo de 1.5 millones de dólares a 1.2 millones, citando la creciente influencia de las stablecoins y el aumento de la adopción institucional. Este cambio destaca el papel evolutivo de Bitcoin, que pasa de ser un activo especulativo a convertirse en un componente clave en las finanzas descentralizadas. Las stablecoins, especialmente en los mercados emergentes, están remodelando la utilidad de Bitcoin, mientras que el interés institucional en los ETFs de Bitcoin sigue en aumento. Además, factores macroeconómicos como la inflación, las tasas de interés y las tensiones geopolíticas están afectando la trayectoria del precio de Bitcoin y su función como cobertura contra los riesgos financieros tradicionales.