Canadá está listo para introducir regulaciones para las stablecoins respaldadas por moneda fiduciaria como parte de su presupuesto federal de 2025. El nuevo marco requerirá que los emisores de stablecoins mantengan reservas adecuadas, establezcan políticas claras de redención e implementen estrategias integrales de gestión de riesgos. Para apoyar esta iniciativa, el Banco de Canadá asignará 10 millones de dólares durante dos años, con costos anuales de 5 millones de dólares que serán cubiertos por los propios emisores. Esta medida se alinea con esfuerzos similares en Estados Unidos para mejorar la seguridad y eficiencia de los pagos digitales para más de 41 millones de canadienses.