La volatilidad implícita a 30 días de Bitcoin se ha estabilizado en un 45 %, lo que indica un período de menor fluctuación en el mercado a medida que se acerca el final del año. Mientras tanto, la volatilidad implícita a 30 días de Ethereum ha disminuido al 70 %, marcando su nivel más bajo desde el 9 de octubre. Esta tendencia sugiere una calma en los mercados de criptomonedas. Además, el interés abierto en los futuros de Bitcoin en CME ha caído por debajo de los 120,000 contratos por primera vez en 2024, destacando una disminución en la actividad de trading institucional. Esta reducción en el interés abierto puede reflejar una postura cautelosa entre los inversores institucionales a medida que el mercado se acerca al cierre del año.