Una propuesta de soft fork de Bitcoin ha generado controversia dentro de la comunidad de criptomonedas debido a su lenguaje que sugiere "consecuencias legales y morales" para quienes se opongan a ella. La propuesta ha recibido una fuerte reacción negativa, con muchos entusiastas de Bitcoin calificándola como un "ataque a Bitcoin." El lenguaje polémico ha suscitado preocupaciones sobre las implicaciones para el ethos descentralizado de Bitcoin y el posible impacto en su gobernanza.