La dinámica del mercado de Bitcoin está evolucionando a medida que la participación institucional y la liquidez influyen cada vez más en los movimientos de precios, divergiendo del patrón tradicional del ciclo de cuatro años. En el cuarto trimestre de 2025, Bitcoin experimentó una caída del 36 % desde su pico, atribuida a la absorción temprana de oferta a través de ETFs al contado y a una menor volatilidad. A pesar de esto, el índice de miedo y codicia indica un resurgimiento del apetito por el riesgo, con el vencimiento de opciones y factores macroeconómicos que podrían preparar el escenario para una recuperación. Aunque los halvings siguen siendo relevantes, la liquidez y los indicadores económicos globales son ahora los principales motores de la acción del precio de Bitcoin.