En 2025, el índice S&P 500 subió más del 16%, mientras que Bitcoin experimentó una caída del 3%, marcando la primera vez desde 2014 en que las acciones subieron mientras las criptomonedas caían. Esta divergencia con otros activos de riesgo contrasta con las expectativas de un repunte de las criptomonedas, especialmente tras el regreso de Trump, que se esperaba fomentara una regulación favorable y aumentara la adopción institucional.