A partir del 1 de enero de 2026, 48 jurisdicciones, incluyendo el Reino Unido y la Unión Europea, implementarán el marco de reporte criptográfico CARF de la OCDE. Esta iniciativa requiere que los proveedores de servicios recopilen y verifiquen datos de residencia fiscal, y presenten informes anuales de transacciones a las autoridades locales, mejorando el intercambio transfronterizo de datos para contrarrestar los esfuerzos contra el financiamiento del terrorismo (CFT). Lucy Frew de Walkers destacó que los intercambios deberán renovar sus procesos de KYC y AML para cumplir con los nuevos requisitos. Asher Tan de CoinJar señaló que los usuarios deben esperar un aumento en las verificaciones de residencia. Aunque CARF no introduce nuevos impuestos, los expertos fiscales enfatizan su papel en mejorar la aplicación mediante informes legibles por máquina.