El yen japonés se acerca a 155 frente al dólar estadounidense mientras la primera ministra Sanae Takaichi aboga por que el Banco de Japón mantenga su política actual de tasas de interés. Takaichi destacó que Japón no ha salido completamente de la deflación, subrayando la necesidad de medidas monetarias adecuadas. A pesar de las intervenciones verbales, el yen sigue bajo presión, con expectativas del mercado que indican un 24% de probabilidad de una reducción de tasas por parte del Banco de Japón en diciembre. Los inversores se están ajustando a la posibilidad de una pausa prolongada en el endurecimiento monetario, ya que las preferencias políticas por condiciones monetarias laxas podrían limitar futuros aumentos de tasas, lo que podría extender la debilidad del yen.