La Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR) del Reino Unido publicó inadvertidamente su perspectiva fiscal antes del discurso presupuestario de la Canciller Rachel Reeves, causando una volatilidad significativa en el mercado. Las proyecciones indicaron una expansión del margen fiscal a aproximadamente 22 mil millones de libras, atribuida a aumentos de impuestos y un incremento en el gasto público. Esta publicación inesperada provocó fluctuaciones en el tipo de cambio GBP/USD, que osciló entre 1.3125 y 1.3200, y en los rendimientos de los bonos del gobierno británico a 10 años, que variaron entre 4.43% y 4.49%. La filtración, resultado de un error técnico, llevó a los participantes del mercado a reevaluar los riesgos relacionados con el crecimiento, la inflación y la oferta de bonos.