Las stablecoins están ampliando cada vez más el alcance del dólar estadounidense al ofrecer una alternativa digital accesible en todo el mundo. Estos activos digitales, vinculados al dólar, ofrecen un valor estable y están ganando terreno en regiones con monedas locales volátiles. Como resultado, las stablecoins están facilitando las transacciones transfronterizas y la inclusión financiera, ampliando efectivamente la influencia del dólar en la economía global.