Un hombre surcoreano de unos 40 años ha recibido una sentencia suspendida por malversar 423,38 millones de wones (307.000 dólares) para invertir en Bitcoin. El tribunal reconoció circunstancias atenuantes, pero destacó la gravedad de utilizar fondos malversados para la especulación con criptomonedas. Las transferencias ilícitas se realizaron en cuatro transacciones separadas antes de ser detectadas. Este caso refleja los esfuerzos internacionales más amplios para mejorar la supervisión regulatoria de las actividades relacionadas con activos digitales, como las iniciativas para combatir la financiación del terrorismo y el Reglamento de Mercados de Criptoactivos de la UE.