Los precios de la plata han alcanzado un máximo histórico, impulsados por un ajuste en la oferta global y los inventarios chinos más bajos en una década. Este aumento se produce mientras la OPEP+ decidió mantener sus cuotas de producción de petróleo para 2026, congelando efectivamente los incrementos en la producción. Mientras tanto, Corea del Sur ha anunciado una supervisión más estricta del mercado de divisas para estabilizar el won en medio de la volatilidad continua del mercado. Además, las ventas globales de armas han aumentado un 5,9 % hasta los 679 mil millones de dólares, reflejando una mayor demanda geopolítica. En respuesta a los desafíos de asequibilidad de la vivienda, los inversores jóvenes recurren cada vez más a activos de mayor riesgo, incluidas las criptomonedas.