Un asesor ruso del presidente Vladimir Putin, Anton Kobyakov, ha sugerido que Estados Unidos podría considerar el uso de stablecoins y criptomonedas para gestionar su deuda de 37 billones de dólares. Kobyakov propuso la idea de trasladar la deuda a una "nube cripto" para distribuir el riesgo de inflación entre los tenedores globales. Este concepto ya ha sido mencionado anteriormente por figuras como Michael Saylor, quien sugirió vender el oro estadounidense para comprar Bitcoin. El uso potencial de stablecoins para diluir la deuda estadounidense a nivel global plantea preguntas sobre la confianza en las reservas, un factor crítico para los poseedores de stablecoins. Cambios en la regulación estadounidense podrían alterar la relación riesgo-recompensa para quienes poseen stablecoins, impactando las estrategias de inversión en valor en el mercado cripto.