Los traders minoristas suelen ser vistos como impulsores clave del Rally de Santa en diciembre, ya que sus órdenes más pequeñas pueden impactar significativamente los precios en los mercados típicamente poco líquidos de la temporada navideña. Este fenómeno no se debe únicamente a la actividad minorista; también implica una mezcla de optimismo estacional y posicionamiento estratégico por parte de jugadores institucionales más grandes. La combinación de estos factores contribuye a los movimientos característicos del mercado a fin de año.