En 2025, se lograron avances significativos en la regulación de las criptomonedas, con los principales mercados implementando una supervisión estructurada. Estados Unidos introdujo la Ley GENIUS, centrada en la regulación de las stablecoins de pago, mientras que la SEC aprobó estándares de listado para productos cotizados en bolsa (ETPs) basados en materias primas. En la Unión Europea, la regulación de Mercados en Criptoactivos (MiCa) estableció protecciones para la emisión múltiple de stablecoins, mejorando la estabilidad del mercado. Además, nuevas normas de custodia para corredores y distribuidores mejoraron la liquidez y la transparencia en los mercados de criptomonedas. El debate en curso sobre la Ley de Claridad continuó influyendo en la delimitación de responsabilidades regulatorias entre agencias. Estos desarrollos regulatorios tienen como objetivo reducir la incertidumbre del mercado y fomentar la innovación dentro de la industria cripto.