Kaspa (KAS) está emergiendo como una altcoin notable debido a su diseño técnico orientado a la descentralización a largo plazo y su potencial para convertirse en una de las 5 principales criptomonedas. La red utiliza la poda MuHash para mantener el almacenamiento de la blockchain por debajo de 200 GB, lo que permite que los nodos operen en hardware de consumo. Esto, junto con tiempos de sincronización rápidos de menos de una hora, mejora la accesibilidad para desarrolladores y usuarios. Estas características, mostradas por Kaspa Visualizer, subrayan la sostenibilidad y resiliencia de la red, posicionando a KAS como una destacada en el panorama evolutivo de las altcoins.