Japón ha anunciado un paquete de inversión de 550 mil millones de dólares destinado a mejorar la infraestructura energética en Estados Unidos. La iniciativa involucra a alrededor de 20 empresas de ambos países, incluyendo actores principales como SoftBank, Westinghouse y Hitachi, con proyectos valorados en aproximadamente 400 mil millones de dólares. La inversión será respaldada por capital, préstamos y garantías de instituciones estatales japonesas, presentando un modelo de participación en las ganancias que transiciona a una propiedad del 90% estadounidense después de que Japón recupere su inversión. Los proyectos clave bajo este paquete incluyen el desarrollo de reactores modulares, liderados por Westinghouse y Hitachi. Se espera que los proyectos iniciales sean identificados para finales de 2025, marcando un paso significativo en la colaboración energética entre Estados Unidos y Japón.