El Consejo de Estabilidad Financiera (FSB) ha destacado la necesidad de un seguimiento cercano de la rápida expansión en los mercados de crédito privado y las stablecoins. En una carta dirigida a los líderes del G20, el presidente del FSB, Andrew Bailey, enfatizó la importancia de modernizar la regulación financiera global sin comprometer la estabilidad. Señaló la creciente importancia de los intermediarios financieros no bancarios. La carta también hizo un llamado a acelerar las reformas en los pagos transfronterizos y al establecimiento de un marco regulatorio sólido para las stablecoins, advirtiendo que las discrepancias regulatorias entre jurisdicciones podrían representar riesgos adicionales.