La Reserva Federal inyectó 50.35 mil millones de dólares en los mercados financieros a través de su Instalación Permanente de Repos el viernes, estableciendo un récord histórico en medio de una mayor demanda de garantías a fin de mes. Esta acción coincidió con una entrada de 51.8 mil millones de dólares a través de la instalación de repos inversos, lo que genera preocupaciones sobre un posible estrés de liquidez en el sistema. Los analistas están trazando paralelismos con la crisis de repos de 2019, a pesar de las garantías de la Fed sobre "reservas amplias". La inyección se produce en un momento en que el mercado enfrenta déficits crecientes y una política monetaria más restrictiva, lo que provoca temores de una inestabilidad financiera subyacente.