Los operadores de Bitcoin enfrentan señales contradictorias ya que dos métricas clave presentan visiones opuestas sobre la trayectoria futura de la criptomoneda. El indicador Strength of the Trend (SOTT), que mide la fuerza del impulso alcista en ciclos largos, se ha tornado púrpura, lo que sugiere un posible agotamiento del ciclo alcista actual. Históricamente, esta señal ha marcado los picos de ciclo en 2014, 2018 y 2022. Por otro lado, el índice Total Summary Risk, una medida compuesta de riesgo versus oportunidad que incluye métricas on-chain, técnicas y de sentimiento, se encuentra en niveles bajos. Esto sugiere un riesgo mínimo para los nuevos participantes, precediendo históricamente a rallies significativos en 2012, 2015, 2019 y 2020. Los operadores deben decidir qué señal seguir mientras navegan por estos indicadores contradictorios.