El CEO de Coinbase, Brian Armstrong, ha alertado sobre hackers norcoreanos que intentan infiltrarse en empresas tecnológicas de EE. UU. aprovechando las políticas de trabajo remoto. En una conversación con John Collison, cofundador de Stripe, Armstrong reveló que estos actores maliciosos están ofreciendo sobornos de seis cifras a agentes de atención al cliente para obtener acceso interno. Para combatir estas amenazas, Coinbase ha implementado medidas de seguridad estrictas, incluyendo orientaciones presenciales obligatorias, controles biométricos y requisitos de ciudadanía para puestos sensibles. Armstrong enfatizó una política de tolerancia cero, que incluye la posibilidad de penas de cárcel para cualquier colaborador involucrado en tales esquemas.