Calvin Ayre, un destacado inversor en Bitcoin SV, ha sido implicado en el escándalo de Wirecard como el "único cliente" de la supuesta red de pagos asiática de la empresa valorada en 1.900 millones de euros. Las investigaciones revelaron que cientos de millones de euros fueron canalizados a través de empresas fantasma asociadas con las operaciones de juego de Ayre. En particular, 135 millones de euros fueron transferidos a una empresa con sede en Antigua, con fondos adicionales dirigidos a entidades en España, Filipinas y Hong Kong. Christian Ager-Hanssen, ex CEO de nChain, confirmó la significativa implicación de Ayre en las actividades fraudulentas que contribuyeron al colapso de Wirecard en 2020. Esta revelación añade una nueva dimensión a la investigación en curso sobre uno de los mayores escándalos financieros de Europa.