Los operadores de derivados de Bitcoin están activamente cubriéndose contra una posible caída por debajo de los $85,000, como lo evidencian las significativas opciones de venta en este nivel. La volatilidad implícita a 30 días del mercado ha aumentado hasta el 45%, reflejando una mayor incertidumbre. Los analistas destacan una perspectiva bajista para principios de 2026, con Ethereum también en riesgo de caer a $2,500. Los datos en cadena indican que los poseedores a corto plazo están experimentando pérdidas, mientras que los inversores a largo plazo están reduciendo sus posiciones en Bitcoin. Se espera que las tensiones geopolíticas y las políticas de la Reserva Federal influyan en la volatilidad del mercado a corto plazo.