Joey, cofundador de Augur, reflexionó sobre la evolución de una década de los mercados de predicción, enfatizando los desafíos iniciales como problemas de liquidez, mala experiencia de usuario e incertidumbre regulatoria. Destacó la importancia de abordar los problemas de los oráculos y mejorar la accesibilidad en lugar de centrarse únicamente en la descentralización. Joey elogió a Polymarket por su éxito en atraer a usuarios no criptográficos mediante predicciones en tiempo real y alta liquidez. También señaló el potencial de los mercados de predicción en la gestión de riesgos, particularmente en la lucha contra la financiación del terrorismo. Joey sugirió que regulaciones claras podrían atraer a inversores institucionales, aunque advirtió que una regulación excesiva podría sofocar la innovación.