Los países asiáticos están acelerando el desarrollo de stablecoins vinculadas a monedas locales en un intento por reducir la dependencia del dólar estadounidense. Hong Kong tiene previsto implementar su Ordenanza de Stablecoins el 1 de agosto de 2025, exigiendo el cumplimiento por parte de los emisores de stablecoins. Corea del Sur está preparando regulaciones para una stablecoin vinculada al won para finales de año, mientras que Japón y Singapur avanzan con opciones de stablecoins reguladas en yenes y multimoneda. Este impulso regional está ganando fuerza en el comercio digital, con Europa respondiendo a través de su proyecto Qivalis.