Los datos del mercado sugieren que el ciclo 2024–2025 podría reflejar la corrida alcista de 2017, con Ethereum y Cardano a la vanguardia de la expansión y escalabilidad de la red. La adopción de la capa dos de Ethereum ha alcanzado niveles sin precedentes, mientras que las recientes actualizaciones de Cardano mejoran la escalabilidad dinámica. Litecoin, Ripple y Chainlink también muestran signos de recuperación temprana y fortaleza técnica. Los avances de Ripple en infraestructura de pagos y claridad regulatoria están fortaleciendo sus capacidades transfronterizas. Mientras tanto, la mayor actividad y actualizaciones de Litecoin, junto con las innovaciones de oráculos de Chainlink, están impulsando el crecimiento de DeFi. Los analistas destacan los flujos recurrentes minoristas, la participación institucional y la mayor actividad de la red como indicadores de un posible auge del mercado.