El cofundador de Ethereum, Vitalik Buterin, ha expresado su preocupación por las posturas políticas extremas de Peter Thiel, que contrastan fuertemente con los ideales de descentralización defendidos por los cypherpunks. Aunque ambas figuras abogan por usar la tecnología para cambiar el mundo, Thiel apoya el control elitista sobre la tecnología para gobernar a las masas, mientras que Buterin y el creador de Bitcoin, Satoshi Nakamoto, creen en el igualitarismo tecnológico. Esta división ideológica subraya un choque fundamental en la filosofía tecnológica, donde la decepción de Thiel con la democracia refleja una desilusión más amplia con los principios igualitarios, que él considera un obstáculo para un verdadero mercado libre.