Los gastos preliminares principales de consumo personal (PCE) de EE. UU. para el segundo trimestre aumentaron un 2,5 %, superando el 2,3 % esperado y disminuyendo desde el 3,5 % del trimestre anterior. Mientras tanto, el Producto Interno Bruto (PIB) real para el mismo período se disparó a un 3 %, superando el 2,4 % pronosticado y recuperándose de una contracción previa del 0,5 %. Estas cifras indican un crecimiento económico y dinámicas inflacionarias más fuertes de lo anticipado en la economía de EE. UU.