La deuda nacional de Estados Unidos ha alcanzado un nivel histórico de 37 billones de dólares, lo que genera preocupaciones sobre la política fiscal y la estabilidad económica. Este hito, reportado el 9 de agosto de 2025, subraya la urgencia de abordar los desafíos financieros de la nación. El aumento de la deuda puede afectar significativamente el gasto gubernamental futuro y el crecimiento económico.