La oferta monetaria M2 de Estados Unidos ha alcanzado un nuevo máximo histórico de 21,94 billones de dólares. Este hito refleja la expansión continua de la base monetaria, que incluye efectivo, depósitos a la vista y dinero cercano fácilmente convertible. El aumento en la oferta de M2 es frecuentemente monitoreado por economistas e inversores como un indicador de posibles presiones inflacionarias y actividad económica.