El reciente cierre del gobierno de EE. UU., confirmado el 1 de octubre, se espera que tenga un impacto más significativo que los cierres anteriores, influenciado por los aranceles en curso y las disputas que involucran a Trump y al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell. Este desarrollo ha provocado una mayor ansiedad en el mercado, con inversores buscando refugios seguros. Como resultado, los precios de Bitcoin y Ethereum se dispararon, reflejando un fuerte sentimiento de aversión al riesgo entre los comerciantes. Además, los precios al contado y los futuros de diciembre del oro alcanzaron máximos históricos de $3,862 y $3,903 por onza, respectivamente, subrayando la huida del mercado hacia la seguridad.