El cierre del gobierno de EE. UU. ha pospuesto la publicación de datos económicos cruciales, incluidos los informes de nóminas no agrícolas y del IPC, lo que ha provocado una calma temporal en el mercado de bonos de 30 billones de dólares. Los operadores se preparan para una posible volatilidad una vez que se reanuden las publicaciones de datos, y la próxima reunión de política del Banco Central añade incertidumbre. El cierre también ha complicado la recopilación de datos, generando preocupaciones sobre la precisión de las cifras económicas de octubre. La actividad en opciones indica que los operadores están cubriéndose contra diversas posibles decisiones sobre las tasas de interés de la Fed, con algunos anticipando solo un recorte de 25 puntos básicos este año.