Donald Trump está intensificando su estrategia para las elecciones intermedias de 2026 enfocándose en recortes de impuestos y promoviendo la unidad republicana. A pesar de no estar en la boleta electoral, Trump está respaldando activamente a candidatos y moldeando el mensaje económico del partido. Está instando a los legisladores a buscar la reelección para evitar conflictos internos, enfatizando la asequibilidad de sus políticas para abordar la inflación y los problemas del costo de vida. La participación de Trump se considera sin precedentes, con una influencia que podría moldear el futuro del partido. Sin embargo, sus índices de aprobación han caído al 38%, lo que genera preocupaciones sobre la unidad republicana y el éxito electoral.