El presidente Trump anunció la posibilidad de adelantar la fecha límite para imponer un arancel del 100% a los productos chinos, originalmente fijada para el 1 de noviembre. Este desarrollo se produce en medio de las tensiones comerciales en curso entre Estados Unidos y China, con posibles implicaciones para los mercados globales. La decisión de adelantar la fecha límite podría intensificar el conflicto comercial, afectando la dinámica del comercio internacional.