El mercado de criptomonedas está presenciando un cambio significativo en la dinámica del comercio de volatilidad, con los operadores enfocándose cada vez más en las opciones de Ethereum (ETH) ya que se percibe que la volatilidad de Bitcoin (BTC) ha disminuido estructuralmente. Este cambio se atribuye a la cobertura institucional y a la falta de catalizadores antes de fin de año. A pesar de la baja volatilidad, los operadores reconocen el potencial de que los precios spot de BTC aumenten significativamente, posiblemente alcanzando millones de dólares. En respuesta a una caída del 6% en ETH hasta alrededor de 4000, los operadores están vendiendo activamente opciones put, apuntando particularmente a opciones con precio de ejercicio de 3900 que vencen durante el fin de semana y en dos días. Esta estrategia busca capitalizar las ventas de primas a corto plazo mientras financia opciones alcistas a largo plazo, aprovechando una inclinación neutral y alta volatilidad tras movimientos repentinos del mercado. Aunque esta caída marca la mayor liquidación larga desde marzo, los operadores la ven como una depuración temporal sin catalizadores fundamentales, posicionándose para obtener ganancias de la compresión de la volatilidad y la decadencia temporal.