Los atletas destacados están convirtiendo cada vez más sus ganancias sustanciales en Bitcoin, prefiriendo la criptomoneda sobre los pagos tradicionales en efectivo. Esta tendencia es evidente tanto en acuerdos de patrocinio como en contratos multimillonarios, donde los atletas optan por recibir su pago en Bitcoin. Este cambio destaca una creciente confianza en el potencial de Bitcoin como reserva de valor y como protección contra la inflación, así como su atractivo por la privacidad y seguridad financiera.