La política fiscal de activos virtuales de Corea del Sur, inicialmente prevista para implementarse en 2027, podría enfrentar su cuarto retraso debido a definiciones poco claras sobre la tributación de airdrops, staking y transacciones en el extranjero. El Ministerio de Finanzas está teniendo dificultades para rastrear eficazmente las transacciones de los inversores en bolsas extranjeras, lo que pone de manifiesto deficiencias en la infraestructura. Los expertos advierten que nuevos aplazamientos podrían socavar la credibilidad de la política y recomiendan la creación de un grupo de trabajo dedicado para mejorar el marco de apoyo.