Corea del Sur ha enviado negociadores senior a Washington para abordar disputas relacionadas con un paquete de inversión propuesto de 350 mil millones de dólares, salvaguardas de intercambio de divisas y términos de alivio arancelario. Las discusiones tienen como objetivo finalizar la estructura de la inversión y garantizar la estabilidad del won surcoreano en medio de preocupaciones sobre grandes flujos de capital. Seúl está explorando alternativas a la inversión directa, incluyendo préstamos y empresas conjuntas, para mitigar la volatilidad mientras se alinea con los objetivos económicos de Estados Unidos.