Un residente en Sichuan, identificado como Li, ha pagado un total de 665,9 millones de yuanes en impuestos atrasados y recargos por demora tras no declarar ingresos provenientes del extranjero. Las autoridades fiscales de Sichuan descubrieron la discrepancia mediante el análisis de datos fiscales. Siguiendo las orientaciones y consejos de política, Li completó las declaraciones y pagos necesarios. Las autoridades recuerdan a los residentes que los ingresos extranjeros deben declararse entre el 1 de marzo y el 30 de junio del año siguiente. No declarar o declarar incorrectamente es ilegal y puede resultar en impuestos adicionales, recargos por demora y consecuencias potencialmente graves, incluyendo investigaciones y exposición pública.