La reciente victoria legal de Ripple ha proporcionado a XRP la claridad regulatoria tan necesaria, posicionándola como una criptomoneda preferida entre los inversores institucionales. La decisión ha generado un mayor interés en Wall Street, con varias propuestas de ETF que ahora están surgiendo. Este desarrollo marca un cambio significativo en la percepción del mercado de XRP, potencialmente allanando el camino para una adopción e inversión más amplias.