El cofundador de Ripple, Chris Larsen, ha respondido a las acusaciones de usuarios en redes sociales sobre la transferencia de 50 millones de tokens XRP. Contrario a las afirmaciones de una venta masiva, Larsen aclaró que la transacción fue una inversión en Evernorth, una empresa centrada en XRP. El abogado pro-cripto Bill Morgan respaldó la declaración de Larsen, enfatizando que la transferencia fue un despliegue de capital y no una venta en el mercado. La controversia afectó brevemente la estabilidad del mercado de XRP, pero no hubo evidencia sustancial que indicara algún daño al mercado. La aclaración tiene como objetivo disipar la narrativa del "dump" y tranquilizar a los inversores sobre la naturaleza de la transacción.