Los reguladores están enfocándose cada vez más en el cumplimiento fiscal de las criptomonedas mediante el seguimiento de billeteras, intercambios y actividades en la cadena. Este aumento en el escrutinio tiene como objetivo garantizar que las personas y entidades reporten sus transacciones de criptomonedas con precisión. El incumplimiento de las obligaciones fiscales puede resultar en sanciones significativas, incluyendo multas, auditorías y potencialmente cargos penales. A medida que las autoridades mejoran sus capacidades de monitoreo, se insta a los usuarios de criptomonedas a cumplir con las regulaciones fiscales para evitar repercusiones legales.