El índice Nikkei 225 en Japón cayó un 3,22% el 18 de noviembre, marcando su mayor caída en un solo día desde abril, cerrando por debajo de la marca de 49,000 puntos. En Corea del Sur, el índice KOSPI también descendió bruscamente un 3,32%, impulsado por una caída en las acciones de chips y un empeoramiento del sentimiento de riesgo en los mercados. Estas caídas significativas reflejan una mayor cautela por parte de los inversores en la región.