El asambleísta del Estado de Nueva York, Phil Steck, ha presentado un proyecto de ley que propone un impuesto del 0,2 % sobre todas las transacciones de criptomonedas dentro del estado, incluyendo stablecoins y el trading de alta frecuencia. Se espera que el impuesto genere 158 millones de dólares anuales, destinados a escuelas que abordan problemas de abuso de sustancias. La propuesta también incluye gravar las transferencias entre las propias cuentas de los usuarios, lo que ha generado preocupaciones en la industria sobre las implicaciones regulatorias. El proyecto de ley, que aún no ha sido debatido en la legislatura, entraría en vigor inmediatamente tras su aprobación.