Max Keiser, un destacado defensor de Bitcoin, ha declarado el fin del experimento de dinero fiduciario de 300 años, coincidiendo con el reciente aumento del precio de Bitcoin. Keiser describió este desarrollo como una "justicia poética", sugiriendo que el ascenso de Bitcoin subraya las debilidades inherentes de las monedas respaldadas por el gobierno. Señaló el cierre del gobierno de Estados Unidos como un evento simbólico que reafirma el propósito fundamental de Bitcoin.