Linea ha activado su mecanismo de quema de tokens, con el objetivo de crear un modelo deflacionario mediante la reducción del suministro de tokens ETH y LINEA. El mecanismo, que ya está en funcionamiento, quemará tokens en una proporción de 1:4 ETH-LINEA por cada transacción en la cadena Linea. Las tarifas de gas, pagadas en ETH, se recaudan y, después de cubrir los costos de infraestructura, se quema el 20% del ETH restante mientras que el 80% se convierte en LINEA y se quema en L1. Además, Linea ha introducido una función para rastrear los datos de quema de tokens.